Estanterías: cómo mantener el orden en casa

El uso de estanterías en casa consigue un triple objetivo: el de la funcionalidad como mobiliario de almacenamiento; el decorativo por su aspecto estético; y el de limpieza y orden por mantener todo alojado en un espacio habilitado para ello.

De este modo, ante la pregunta de cómo mantener orden en casa, las estanterías son la respuesta perfecta. Te mostramos algunos consejos para sacar partido de estos muebles, incidiendo especialmente en las distintas tipologías, pues puedes encontrar estanterías y baldas útiles para todas las estancias de la vivienda.

Cómo mantener el orden y la limpieza en casa con estanterías

Si has llegado hasta aquí preguntándote cómo mantener el orden y la limpieza en casa, no pierdas detalle de los siguientes consejos. Para empezar, libera todos los libros, enseres y objetos decorativos que tengas en cada estantería y descarta aquello que no uses o no sirva como elemento decorativo.

Tras este paso, dona todo aquello que hace bulto y deja hueco libre para ir rellenando todo ese espacio libre. No olvides limpiar a fondo las baldas con un trapo húmedo y eliminar las telarañas de los techos. El suelo de alrededor también hay que aspirarlo.

La siguiente acción es colocar adecuadamente todo aquello que va a ir en la estantería. Si quieres ganar en orden, selecciona varias gamas cromáticas que contrasten o combinen, coloca objetos y libros de mayor a menor tamaño y combate el temido efecto gráfico de barras.

Las estanterías son estructuras perfectas en las que almacenar cosas para ordenar tu casa, pero si todo lo que acumulas en ellas tiene el mismo tamaño, textura y color, el mueble va a quedar un poco aburrido.

El último paso es integrar elementos decorativos. Ya hemos mencionado previamente que la principal función de estos muebles es el almacenamiento, pero de manera secundaria también pueden servir al apartado estético, para dotar a la vivienda de más estilo.

Tipos de estanterías para cada estancia

La idea de combinar almacenamiento y decoración se refleja en los distintos tipos de estanterías que podemos colocar en casa. Según la estancia en la que se ubique, este mueble precisará de un orden y una decoración diferente.

Estanterías para el salón

El salón es el espacio más común en el que situar estanterías. Lo habitual es acudir a muebles de grandes dimensiones, con aspecto robusto y duradero, pero que no pretenden ganar mucho protagonismo en la estancia.

La idea es que sea un complemento decorativo más, que ofrezca su función de almacenamiento y que, incluso, sirva como frontera visual en espacios abiertos. Así, una buena estantería puede ser el elemento de separación entre el salón y el comedor si se sitúa tras un chaise longue.

Las baldas pueden albergar menaje de cocina, objetos de decoración, libros y todo tipo de documentos. En Merkamueble puedes encontrar un amplio catálogo de estanterías óptimas para su uso tanto en el salón como en el dormitorio o en el despacho y la sala de estudios.

Estanterías de baño

Las estanterías de baño se caracterizan por tener un tamaño más pequeño que las de salón. Pueden ser altas o bajas, pero tienen un aspecto más ligero. Son muebles con varias baldas de metal o de madera que sirven para alojar toallas y productos de aseo.

En estas estructuras la clave es que estén elaboradas a partir de materiales resistentes a la humedad. La función es básicamente de almacenamiento. No obstante, esto no está reñido con el apartado decorativo.

A pesar de que en sus baldas solo se incluyan objetos de uso cotidiano y no tantos elementos decorativos, su integración estética también es importante, de modo que cuanto toque elegir modelo, hazlo pensando en otras estructuras como los sanitarios, la iluminación y el espacio disponible.

Estanterías en la cocina

Las estanterías de cocina y las de baño son diferentes a las del salón o la habitación, incluso las de los pasillos, porque todas estas últimas están pensadas para un uso de almacenamiento y orden.

En la cocina y el baño, que son estancias de un uso más práctico y donde se pasa menos tiempo, los muebles deben buscar, por encima de todo, la funcionalidad. En el caso de la cocina, las estanterías pueden ser muebles como tal al uso o bien baldas colocadas directamente sobre la pared.

Sí es importante que sean abiertas, para que todo quede a la vista. Su ubicación es también relevante, hay que situarlas en áreas cercanas al espacio de trabajo. En ellas se pueden colocar objetos de uso diario, condimentos, enseres y pequeños electrodomésticos y hasta alguna planta aromática para darle un toque de color al conjunto.

Las estanterías son un elemento fundamental para cualquier vivienda. Seguro que, si te paras a pensar, tienes más de una en toda tu casa. Su elección va a depender tanto del espacio a ocupar como de sus propias características: tamaño, material, tipología. Con ellas estamos convencidos de que te resultará más fácil tenerlo todo ordenado y limpio.