Ten en mente el espacio
Una vez que hayas elegido el color, otra de las cosas que debes hacer es medir para conocer qué espacio tienes. Aunque son muchas las ideas para decorar un recibidor que existen, no todas ellas se pueden aplicar en todas las estancias.
Por este motivo, coge un metro y empieza a delimitar si cuentas con más o menos espacio. Cuando lo tengas todo medido y bien apuntado, es el momento de continuar eligiendo los objetos con los que decorarás tu recibidor.
Elige un mueble acorde a tu entrada
El mueble es siempre uno de los elementos más importantes a la hora de decorar la entrada de casa. En el caso de que tu recibidor no sea demasiado grande, puedes optar por una repisa con un espejo encima, una consola sencilla o un mueble pequeño.
Sin embargo, en el caso de que cuentes con más espacio, te puedes decantar por un mueble recibidor más grande. Ten en cuenta que esto te ayudará también a aumentar el almacenaje de la estancia.
Añade almacenaje extra
Tanto si tu recibidor es grande como si es pequeño, está claro que el almacenamiento es una de las claves para que sea práctico. Por ello, si eliges un mueble de buen tamaño, con repisa, cajones o puertas, ya tendrás gran parte del trabajo hecho.
No obstante, si te decantas por una consola o una repisa, siempre puedes cubrir el hueco del suelo con un baúl, cajas de almacenaje o cestos de mimbre, donde podrás guardar los objetos que necesites y que no desees que se encuentren siempre a la vista.
Coloca un banco para mayor comodidad
Otro de los elementos clave en la decoración de entradas y recibidores es el banco. Aunque bien es cierto que no cabe en todos los espacios, si tienes posibilidades de añadirlo, no dudes que será una gran decisión.
Este banco lo puedes usar tanto como repisa como para ponerte y quitarte los zapatos cada vez que vayas a salir o entrar en casa. Además, debajo del mismo, habrá espacio para añadir otro cesto o caja con el que guardar más objetos.
Haz sitio para colgar los abrigos
Por otro lado, es necesario recordar que el recibidor es la zona del hogar que primero vemos al entrar y la última al salir. Por este motivo, es necesario, sobre todo en invierno, que haya espacio donde dejar las chaquetas y abrigos.
En caso de que tu entrada sea amplia, no dudes en añadir un armario. Sin embargo, si no tienes espacio suficiente, también puedes colocar unas perchas con sentido que te ayudarán a conseguir tu objetivo.